EL YOGA Y EL WHISKY
Una de las cientos de miles páginas yogueras describe al yoga de la siguiente manera:
"La palabra yoga procede de la raíz sánscrita "Yuj" que significa yugo, unión, lazo, unidad.
Así pues Yoga significa literalmente unión, la unión del hombre con su realidad superior, la fusión del hombre con la realidad universal.
Podríamos decir que “es la unión con uno mismo”.
Su objetivo es la integración armónica de la personalidad, en la unión de la mente consciente con los niveles mas profundos del inconsciente.
Podemos definirlos como una técnica de autorrealización y mejoramiento del ser humano, que aspira a la felicidad como un estado interno de inalterada paz."
Salvo la contradicción del primer párrafo, materializada en eso de la unión del hombre con "su realidad superior" y "la unión con uno mismo", materia que se podría prestar a discusión, por cierto, estamos en condiciones de afirmar fundadamente que el Yoga y el Whisky no sólo comparten algunos objetivos sino también las técnicas utilizadas en orden a dichos fines.
En efecto, en cuanto a los fines es indudable que unas cuantas buenas dosis de líquido amarillo nos conectan con "los niveles más profundos del inconsciente", así como también nos sumen en un "estado interno de inalterada paz".
En lo que respecta a las técnicas, la coincidencia es total, y si no lo creen, miren como ejemplo la imagen que acompaña esta nota.
Enviada por Jorge Karabás
con mucho humor.