¿Dónde estamos?

Argentina está situada en el Cono Sur de Sudamérica, limita al norte con Bolivia, Paraguay y Brasil; al este con Brasil, Uruguay y el océano Atlántico; al sur con Chile y el océano Atlántico, y al oeste con Chile. El país ocupa la mayor parte de la porción meridional del continente sudamericano y tiene una forma aproximadamente triangular, con la base en el norte y el vértice en cabo Vírgenes, el punto suroriental más extremo del continente sudamericano. De norte a sur, Argentina tiene una longitud aproximada de 3.300 km, con una anchura máxima de unos 1.385 kilómetros.
Argentina engloba parte del territorio de Tierra del Fuego, que comprende la mitad oriental de la Isla Grande y una serie de islas adyacentes situadas al este, entre ellas la isla de los Estados. El país tiene una superficie de 2.780.400 km² contando las islas Malvinas, otras islas dispersas por el Atlántico sur y una parte de la Antártida. La costa argentina tiene 4.989 km de longitud. La capital y mayor ciudad es Buenos Aires

PAPA FRANCISCO

PAPA FRANCISCO

Cornelio Saavedra relata las intimidades del 19 de mayo de 1810

Memoria autógrafa de Cornelio Judas Tadeo Saavedra:


El 19 [de mayo de 1810, el virrey Cisneros] nos citó para que a las siete de la noche estuviésemos todos en la fortaleza. [...] Se nos presentó el virrey y nos dijo: "Señores, se me ha pedido [... ]para convocar sin demora, al pueblo, a cabildo abierto, [pero] yo no he dicho que la España toda está perdida, pues aún nos que­dan Cádiz y la isla de León. Llamo a ustedes si están resueltos a sostenerme en el mando o no".

Viendo que mis compañeros callaban, yo fui el que dijo al [virrey]: “Señor, ¿este territorio inmenso, sus millones de habitantes, han de reconocer soberanía en los comerciantes de Cádiz y en los pescadores de la isla de León? [...]. No, señor; no queremos seguir la suerte de España, ni ser dominados por los franceses: hemos resuelto reasumir nuestros derechos y conservarnos por nosotros mismos. El que dio autoridad a V.E. para mandarnos ya no existe; por consiguiente, V.E. tampoco la tiene ya, así que no cuente con las fuerzas de mi mando para sostenerse en ella". Esto mismo sostuvieron todos mis compañeros. Con este desengaño [Cisneros] terminó diciendo: “Pues señores, se hará el cabildo abierto que se solicita".

Cornelio Saavedra, Memoria autógrafa, Buenos Aires, 1829.
http://www.lagazeta.com.ar/cabildo_abierto.htm#01