¿Dónde estamos?

Argentina está situada en el Cono Sur de Sudamérica, limita al norte con Bolivia, Paraguay y Brasil; al este con Brasil, Uruguay y el océano Atlántico; al sur con Chile y el océano Atlántico, y al oeste con Chile. El país ocupa la mayor parte de la porción meridional del continente sudamericano y tiene una forma aproximadamente triangular, con la base en el norte y el vértice en cabo Vírgenes, el punto suroriental más extremo del continente sudamericano. De norte a sur, Argentina tiene una longitud aproximada de 3.300 km, con una anchura máxima de unos 1.385 kilómetros.
Argentina engloba parte del territorio de Tierra del Fuego, que comprende la mitad oriental de la Isla Grande y una serie de islas adyacentes situadas al este, entre ellas la isla de los Estados. El país tiene una superficie de 2.780.400 km² contando las islas Malvinas, otras islas dispersas por el Atlántico sur y una parte de la Antártida. La costa argentina tiene 4.989 km de longitud. La capital y mayor ciudad es Buenos Aires

PAPA FRANCISCO

PAPA FRANCISCO

Batalla de URUGUAYANA – 18 de septiembre de 1865

(Algunos datos)

La guarnición paraguaya de Uruguayana contaba con aproximadamente 6.000 hombres, mientras los aliados contaban con 17.000.

Mitre considera a las tropas rendidas como “botin de guerra”, tal como lo entendía del protocolo secreto de la Alianza, y por eso en el parte dispone: “La tropa del enemigo será dividida entre los aliados en partes iguales, con arreglo a las estipulaciones...”

Así fue que mientras los brasileros se arrebataban los prisioneros para venderlos como esclavos, el general Flores, con la aprobación implícita de Mitre, los incorporaba a los regimientos orientales y argentinos, obligándolos a combatir contra su patria.
Cuando López de entera de “la vergonzosa noticia de la rendición de Uruguayana”, lanzó una proclama condenando la conducta de Estigarribia, quien “responderá ante Dios y la Patria del único acto que con vergüenza registramos en la historia”, señalando la desesperada lucha librada por las tropas en Yatay, “sin el menor auxilio del cuerpo principal del mando del Teniente Coronel Estigarribia, únicamente separadas or el ancho del río, con tiempo y medios de pasajes” (Orden del día del mariscal López. Cuartel general de Humaitá, 6 de octubre de 1865. “Partes oficiales”)

Fue generalizado el robo de prisioneros por los aliados para ser vendidos utilizados como esclavos, y no hubo oficial que no se llevara varios “paraguayitos” como botín.
En carta que escribe Mitre a Marcos Paz le dice “Nuestro lote de prisioneros en Uruguayana fue de poco más de 1.400. Extrañará a usted el número, que debiera ser más; pero por parte de la caballería brasileña hubo tal robo de prisioneros que por lo menos arrebataron 800 o 1.000 de ellos, lo que muestra a usted el desorden de esa tropa, la falta de energía de sus jefes y la corrupción de esa gente, pues los robaron para esclavos, hasta hoy andan robando y comprando prisioneros. El comandante Guimaraes, jefe de una brigada brasileña, me decía el otro día que en las calles de Uruguayana tenía que andar diciendo que no era paraguayo para que no lo robaran” (Carta de Mitre a Marcos Paz - 4 de octubre de 1865 - JMR.La guerra del Paraguay.p.239)

No sé de que se escandalizaba Mitre, que incorporaba forzadamente a los prisoneros paraguayos a su propia tropa, para luchar contra su Patria. Tampoco se daba por enterado Mitre que en 1852,luego de Caseros, Urquiza trasladó a Entre Ríos un contingente de 700 negros libres "para enseñarles lo que era la libertad obtenida el 3 de febrero, contra la dictadura". ¿No los habrá vendido a Brasil, como la caballada del ejército? (JMR.La guerra del Paraguay.p.240 - A. Zinny. Historia de los gobernadores. t.II.p.195)

En carta fechada en Humaitá el 20 de noviembre, López le protesta a Mitre por el trato dado por los aliados a los prisioneros paraguayos. Entre otros conceptos le dice que “Es de uso general y práctica entre naciones civilizadas atenuar los males de la guerra por leyes propias, despojándola de los actos de crueldad y barbarie, que deshonrando a la humanidad, estigmatizan con una mancha indeleble a los jefes que los ordenan, protegen o toleran, y yo lo había esperado de V.E. y sus aliados..."

Y continúa la carta de López:

“La estricta disciplina de los ejércitos paraguayos en territorio argentino y en la poblaciones brasileras así lo comprueban...y mientras tanto V.E., iniciaba la guerra con excesos y atrocidades...La bárbara crueldad con que han sido pasados a cuchillo los heridos del combate de Yatay...y acciones todavía más ilegales y atroces que se cometen con los paraguayos que mantenido la fatal suerte de caer prisioneros del ejercito aliado en Yatay y Uruguayana, V.E. los ha obligado a empuñar las armas contra la patria(...)haciéndolos traidores, y aquellos que han querido resistir a destruir su patria con sus brazos han sido inmediata y cruelmente inmolados. Los que han participado en tan inicua suerte, han servido para fines no menos inhumanos y repugnantes, pues que en su mayor parte han sido llevados reducidos a la esclavitud en brasil, y los que se prestaban menos por el color blanco de su cutis para ser vendidos, han sido enviados de regalo, como entes curiosos sujetos a la servidumbre. Este desprecio, no ya de las leyes de la guerra sino de la humanidad, esta coacción bárbara como infame que coloca a los prisioneros de guerra entre la muerte y la traición, o entre la muerte y la esclavitud, es el primer ejemplo que conozco en la historia de las guerras, y es a V.E., al emperador del Brasil y al actual mandatario de la República Oriental a quienes cabe el baldón de producir y ejecutar tanto horror”

Fuentes:

- García Mellid. Atilio. "Proceso a los falsificadores de la historias del Paraguay"
- Chiavenatto Juilio José. Genocidio Americáno: A Guerra do Paraguai.-Sao Paulo
- José María Rosa . La Guerra del Paraguay y las Montoneras argentinas.
- La Gazeta Federal http://www.lagazeta.com.ar/